"Mate Cosido"
Se autotitulaba “el bandido de los pobres”.
Cuenta la leyenda que en diciembre de 1939 su banda secuestró al estanciero Jacinto Berzón, por cuyo rescate pidieron 50.000 pesos moneda nacional, con precisas instrucciones: el dinero sería arrojado el 7 de enero de 1940, desde el tren, antes de la Estación de Ferrocarril de Villa Berthet, Chaco. Pero algo salió mal. Una traición. Un accionar policial y Peralta resulta herido en el tiroteo en su cadera.
Recordamos que era enemigo de los enfrentamientos armados.
Después de este episodio, no volvió a hacer apariciones públicas y si murió, tampoco se supo nada y nunca se encontraron sus restos.
David Segundo Peralta alias “Mate Cosido”, pasó a la inmortalidad a través de las historias que sobre su correría narraban los pobladores.
Adrián Abonizio compuso una canción llamada “Historia de Mate Cosido” que luego fuera popularizada por Juan Carlos Baglieto.
Vale la pena destacar la canción de León Gieco titulada “Bandidos Rurales” donde se narra la vida de populares bandidos entre ellos la de “Mate Cosido”.
Nélida Argentina Zenón compuso un chamamé clásico al que bautizó como “Mate Cosido” y que narraba todas sus andanzas y cuya letra dice:
“Esta es la historia de un gaucho bueno que un día el destino lo castigó llenando su alma de tucumano de la injusticia que lo venció.
Mate Cosido era el apodo de aquel bandido bravo y feroz que fue el terror del norte argentino del 18 al 42.
Formó su trío de bandoleros con Zamacola y el “calabres” en los poblados y en los caminos fueron temidos yaguaretés.
Pero fue un día, allá, en el Chaco, que un compañero lo delató, desde aquel día Mate Cosido huyó a la selva y nunca volvió”.
Leyenda o no, David Segundo Peralta, es recordado entre los pobladores de nuestro litoral como el bandido que robaba a los ricos para dárselos a los pobres.
Ya es inmortal.