La comunidad de Mariano Acosta se vio conmocionada por un hecho de abuso deshonesto a un menor, por parte de un comerciante de la zona que mantenía una relación laboral con el padre del menor y ambas familias compartían una amistad desde tiempos a tras.
Abusando de la confianza depositado en éste “individuo”, cuando los padres del menor permitieron que lo acompañase a realizar determinado trabajo. Ocasión que fue aprovechada para obligar al niño a que se “dejase” realizar sexo oral.
Tras un par de meses, el chico desató algún tipo de actitudes que preocuparon a sus padres que lo hicieron tratar con profesionales, aunque el niño solo se atrevió hablar del tema con su progenitora.
Los padres decidieron dar a conocer públicamente el horrible acontecimiento, con el claro objetivo de que la Justicia evite que éste “individuo” pueda continuar en libertad cometiendo las atrocidades que, se sospecha, no sería el único caso.
El “individuo”, un comerciante muy vinculado a la iglesia católica (posiblemente catequista), identificado como Ricardo Acosta, del comercio “Richart eventos”, recibió el repudio de los curas del la zona, el Párroco Rogelio (San José Obrero) y tibiamente, el Párroco Sergio (Lourdes), en sendos comunicados a los fieles.
La causa está radicada en la Fiscalía
N° 7, a cargo del Dr. Matías Rapazzo
Logran liberarlo, tras ser secuestrado
La rápida intervención de un vecino que observó la acción sospechosa, hizo posible el accionar policial de los efectivos de la 6° de Mariano Acosta que, tras recibir una llamada del 911, iniciaron la persecución de los malvivientes, desplegando un “operativo cerrojo” que permitió liberar a la víctima y detener a uno de los delincuentes involucrados, en pleno centro comercial del Barrio Matera.
El comerciante y vecino de muchos años víctima del acto delictivo fue Daniel Mazrrima.
El malviviente arrestado resulto ser un residente de nacionalidad paraguaya que tendría un frondoso prontuario.