Editorial

Mayo se vive, se palpita

Cómo cada año el mes de mayo tienen una particularidad muy especial en la vida de los argentinos.

No tan solo por conmemorarse un año más del nacimiento de la Patria , si no que también por acontecimientos que, cada año, coincide con determinaciones políticas, que generaran todo un desarrollo vinculado a lo social, económico y cultural del país.
Hombres y mujeres, militantes del campo político, se preparan para hacer conocer sus intenciones, sus posibilidades y en dónde se encolumnarán  para sus pretensiones.
Es que pareciese que los festejos por el 25 de Mayo despierta el ánimo de la participación popular.
Las “colas” en los negocios, en el banco, en las filas del colectivo, en el andén del tren y mucho en bares y peluquerías, el tema central es la política.
Ni hablar de las redes sociales como facebook, twiter, instagram, lo curioso aquí que todos los que opinan, escriben o se expresan terminan tratando de explicar lo inexplicable:
“ojo que yo no soy político/a”; “a mí la política no me gusta”; “soy apolítica/o”.

Y siempre me preguntó: lo harán  para justificar su propia inseguridad?.

A esto se suman los que sí son militantes políticos, algunos que ocupan cargos públicos y otros cargos electorales.
A todos les “sobrevienen el fantasma de qué vamos a hacer”; “qué hará el conductor de nuestro espacio”. Y como si fuera poco, “la yegua” dice: “nace el Frente Ciudadano”, se va del PJ, en un claro mensaje a  “los gordos” y a los “nuevos”.
“Síganme los buenos” la celebre frase del “Chapulín  Colorado”, personaje del inolvidable Bolaño, suena y retumba más que nunca, y se les cayó la estantería a más de uno.
Como si fuera poco, la amenaza más (más que ameazas) que “el que se va no vuelve”, como si esta historia ya no se hubiese vi

vido en anteriores oportunidades, intenta hacer “mella” en el corazón de aquellos que aún creen que el PJ, lo es todo y se olvidan de que es solamente una sigla denominativa a un sentimiento que  es ser PERONISTA, de Perón y Evita y las que no se abandonan son sus “banderas”.

Para propios y extraños:

Se es peronistas más allá del espacio en que estés parado, por que las convicciones no se pierden, ni se  canjean por un cargo (como hoy lo están haciendo muchos).

Y después están los otros. Un año electoral en donde no hay mucho que arriesgar, solo la preocupación de mantener lo conseguido, por lo tanto, “hacemos la plancha”.

Para los que creemos que el periodismo es también compromiso ciudadano, no tenemos dudas (este es mi caso)

El Sol del 25 ya salió. Pero a diferencia de 1810, el Pueblo no tiene que preguntar de qué se trata.

Hoy tiene que ser: PROTAGONISTA!!