Reperfilando...!!

Hay preguntas que no tienen respuestas…!

La presidencia del Frente de Tod@s, en manos de Alberto Fernández , perdió la brújula?

O es simplemente realizar lo que realmente pensó realizar desde ese lugar en que el kirchnerismo lo colocó.

Qué le aportó Alberto al triunfo “K” peronista?

La alianza con Sergio Massa y su 13%?

Desde el momento que asumió se lo vio intentar imponer un estilo propio, más ordenado, con mejores modales, no contestatario, dialoguista, es decir “prolijo” con los propios y con la oposición, pero (y siempre hay uno) las cosas no fueron saliendo como él y su entorno lo pensaban.

Según lo afirmaban en su entorno “quería diferenciarse de la desprolijidad de Cristina en su último mandato”. No lo está logrando.

Las diferencias entre él y Cristina son cada vez más evidente. Y se hicieron públicas en la Ciudad de las Diagonales, en un acto en conjunto en donde participaba Máximo, Axel y Verónica.

Y no era esa la primera vez.

La ex y actual vice, dejó intuir que, hay quienes tienen miedo a tomar  determinaciones que los enfrente con el “poder hegemónico ” y los instó a que “se busquen otro trabajo”.

No hubo ninguna respuesta de parte de Alberto, solo días después, tras ser cuestionado por “su entorno” que encabeza Sergio Massa, se animó a decir que: “yo confío en mis Ministros y Ministras”… y todo lo demás. Y así con total tibieza no logró recuperar algo de autoridad, ni frente a la gente, ni frente a los militantes y mucho menos en su entorno massita que lo cuestionó.

Claramente CFK marcó las diferencias:

*El triunfo del Frente de Tod@ no se debió solamente a la tan mentada “unidad”. (El aporte  de Alberto fue la alianza con Massa y algún otro sector reacio a “juntarse” con la “yegua” ).

*La memoria colectiva fue un importante aporte al triunfo, que no olvidó los años de un relativo bienestar (incluyendo el período de Néstor y sus dos mandatos). Señaló.

Cristina sabe que en ese entorno de Alberto están los que opinan que hubo errores en su gobierno que colaboró al triunfo de Macri, ya sea por errores en la economía u otros que se le achacan. Por ejemplo mantener las tarifas congeladas de los servicios públicos, algo que en poco tiempo Alberto y sus colaboradores piensan actualizar.

Quedo flotando en el aire a modo de “advertencia” , si se incrementan los precios de  estos servicios públicos como ser, luz, gas, transporte y telecomunicaciones, que pueda afectar el poder adquisitivo de la gente con sus escasos salarios y/o jubilaciones, puede ser desfavorable en porcentajes no imaginados de rechazos.

Justamente quien más cuestiona el estancamiento en los precios del los servicios públicos en su presidencia, es nada más y nada menos que el Ministro de Economía de Alberto, Martín Guzmán. Aunque  éste se preocupa en aclarar que no es una imposición del Fondo sino que deben acompañar la inflación,

marcando una diferencia con la administración anterior no deben pegar saltos abruptos pero sí adaptarse porcentualmente mes a mes, se le suele escuchar.

A que le teme Alberto Fernández y su equipo

*Subsidios en aumentos desconsiderados y por doquier.

*Enfrentamiento con el campo

* A que no se abra la participación de los privados como objetivos para crecer económicamente.

*Baja inversión tanto extranjera como local.

*Falta d energía para sostener la demanda interna y fabril.

*Déficit Fiscal.

*Y fundamentalmente quedarse sin dólares.

La pregunta del millón

Que va a pasar cuando se quiera establecer los nuevos valores en los servicios considerando que los Organismos de control está en manos de los referentes políticos que responden a Cristina.

Allí en donde todavía muchos responden al ex Ministro Julio De Vido, quien supo estar muy enfrentado a Alberto Fernández cuando era Jefe de Gabinete.

Cristina fijó objetivos que se oponen al pensamiento de Alberto y Sergio

En Salud: Habló de la Reforma Sistemática del Área Salud.

Señaló la falta de eficiencia del mismo, la falta de inversión que solo alcanza al 6% y, dentro de su deficiencia está la corrupción del sistema sanitario, aunque no lo mencionó, todos entendieron que miraba hacia los Sindicalistas que tienen casi el manejo total de las Prestadoras. Y también a la superposición de intereses entre las prepagas, los privados y los sistemas públicos tanto de Nación como el de las Provincias y los Municipios.

Vale recordar el enfrentamiento de Cristina con Hugo Moyano (mientras era presidenta) fue justamente cuando le pone control y les quita el manejo de las Obras Sociales. Una “caja” super millonaria de los sindicalistas.

Ese incremento que el Presidente les dio de un 7% en cuotas, rápidamente fue para atrás en solo cuestión de horas.

Hoy ya se conoce que se podría designar en la oficina de contralor (Super Intendencia de la Salud)  a una mujer muy del riñón de “K”, Liliana Korenfeld, por ese motivo, los sindicalistas estarían convocando a una “cumbre” para autodefenderse y tratar de evitar la profunda reforma que impulsa la vicepresidenta.

Lo cierto es que Alberto Fernández parece navegar sin rumbo fijo. Se ve atado a las exigencias de Sergio Massa que él concedió cuando lo convenció para que encabece la fórmula a Diputado Nacional y los planteos de cambiar el rumbo o por lo menos enderezarlo, de Cristina.

Ella sabe que más allá del resultado de la última elección la única que cuenta con un 35% de los votos asegurado es ella y lo impondrá, le guste o no a Alberto y su “entorno massista”.

Una tabla salvadora para Alberto

Aunque parezca increíble la tabla salvadora de Alberto es una “K”, pero de Cámpora.

Si es nada más y nada menos que Máximo Kirchner quien en su ambición política de desembarcar en la Provincia de Buenos Aires, le exigió apoyo a Massa y a Fernández para encabezar el PJ de la Provincia y ambos estuvieron de acuerdo en apoyarlo, contradiciendo a ciertos intendentes de la Provincia, sobre todo del Conurbano como  Menéndez y Gray.

Los pasillos de la Cámara de Diputados de la Nación hablan y también los ordenanzas.

Cuentan de los “encuentros”  entre  Máximo y Sergio, como el nacimiento de una “amistad política” muy fuerte y de conveniencia mutua que supera aún la relación entre Sergio y Alberto que pasó a tercer plano.

Solo hay que esperar y desde la Cámpora convocan a no atacar al Presidente de todos los argentinos.

Hasta nuevo aviso….!