Nuestros caballos en el cambio de estación climatica

Intensificar sus cuidados

"Fantasma"

 Suele ocurrir que, durante los últimos días de verano y la llegada del otoño, el clima se enrarezca demasiado. De muchos días con lluvias pasa a una sequía intensa con bajas temperaturas, y sol muy fuerte lo que hace que la tierra se reseque y se encuentre en los campos de pastoreo mucho polvo y pocas pasturas.

Sumamente perjudicial para ellos.

El polvo que se ven obligados a respirar en el preciso momento que “rasguñan” el poco pasto que hay, les causa dificultades para respirar ya que se les reseca mucho las membranas de su nariz provocándoles mucha picazón y en algunas oportunidades, hasta tos seca.

Este estado los predispone para contraer moquillo también llamado como Adenitis o Papera, predisponiéndolos  para  incorporar el virus de Influenza Equina o Gripe Equina.

Cómo evitarlo, es nuestro preocupación y la experiencia nos indica que es mejo un caballo estabulado (en box o un pequeño corral) con abundante agua fresca y una penca de alfalfa por la mañana, para reemplazar el pastoreo habitual.

Se puede reforzar al medio día  con un kilo o un poco menos, de acuerdo al tamaño del animal, de avena o sus componentes con otros derivados.

Para sí, a la noche, darle su ración habitual. Un consejo más, dar la alfalfa separadas de otras comida y no dar de noche. Nuestros caballos tardan mucho para su digestión