No es para mal de ninguno si no para bien de todos!!
La pesada herencia
Desde la asunción de los nuevos Intendentes en el Conurbano bonaerenses, se habla de la “pesada herencia”.
En Olavarría, el macrista intendente electo Ezequiel Galli, denunció en primera instancia a su antecesor José Eseverri, alegando “presunción de comisión de delito de acción pública”. La presentación surgió de una auditoria.
En General Pueyrredón, después de conocerse los resultados de una auditoria y el informe del Tribunal de Cuentas, el Jefe Comunal electo, Carlos Arroyo denunció judicialmente a la gestión anterior de Gustavo Pulti.
En Quilmes, Martiniano Molina, denunció judicialmente al peronista Francisco “Barba” Gutiérrez.
En Lezama, el electo Arnaldo Harispe denunció al saliente Marcelo Raciatti, por una deuda de $ 7 millones.
En Brandsen, Daniel Cappelletti amenazó que denunciará a Gastón Árias por irregularidades en obras y compras de tierra entre sus familiares.
En la localidad de Azul el electo Hernán Bertllys denunció a el ex José Inza por el faltante de más de tres mil bienes patrimoniales.
En Chivilcoy llegó a la justicia las denuncias contra la gestión de Dario Speranza , por parte del electo Guillermo Britos.
En el partido de 9 de Julio, se creo una Comisión Investigadora, contra el ex intendente Walter Battistella.
Y así se podría continuar enumerando las denuncias de los electos contra los salientes. Primero fueron denuncias públicas luego se elevaron a la Justicia.
Como ocurrió en nuestro distrito.
El Intendente electo, Gustavo Adolfo Menéndez, a pocos días de asumir y lo que se conoció como un “Cabildo Abierto”, realizado en la Quinta Municipal “La Colonial”, habló de un faltante de 450 millones de pesos.
Recién después de la charla que mantuvo Menéndez con el Papa Francisco, elevó judicialmente su denuncia que incluye: peculado, estafa, enriquecimiento ilícito y fraude contra la administración pública.
Serían 60 procesos que implican a 25 personas, entre funcionarios de primer nivel, familiares y amigos del ex intendente Raúl Alfredo Othacehé.
El último barón del conurbano.
La Justicia tiene la última palabra.